SOBRE EL TEATRO
Desde 1932, el Teatro Santander ocupa un lugar privilegiado en el corazón de Bucaramanga, a escasos metros del Centro Cultural del Oriente. Ubicado en el Barrio Centro de la ciudad, junto al Parque Centenario, el Teatro Santander se distingue por su destacado carácter arquitectónico, sus exigentes condiciones técnicas y una oferta variada y de alta calidad.
Con una programación que sobresale por su calidad y diversidad, el Teatro Santander se posiciona como el escenario de las artes escénicas más importante del oriente colombiano. Ha sido reconocido como uno de los espacios patrimoniales con más prestigio e historia del país, gracias a su imponente arquitectura y su innovador equipamiento técnico y tecnológico.
Sus instalaciones, ubicadas en el centro de Bucaramanga, cuentan con una gran sala con capacidad para recibir a 912 personas en sillas divididas en tres niveles: platea, balcón y paraíso. Además, cuenta con el espacio del ‘Teatro Escuela’, una black box de 11*16 metros equipada con tecnología de última generación, para la creación y presentación de nuevos y novedosos formatos escénicos.
Los espacios del Teatro Santander destacan por su estilo moderno, acústica ideal y su distintivo telón de boca: lienzo pintado por la artista santandereana, Beatriz González Aranda. Sin duda, una experiencia para los amantes de las tablas que visiten la ciudad bonita.
Fachada
Gran Sala
Salón fundadores (Lobby)
Teatro Escuela
Teatro Escuela
Cafetería
Si está interesado en alguna de nuestras salas, comuníquese al siguiente correo: jefedesala@teatrosantanderbga.com, enviando un brief de su evento y fecha solicitada.
Sobre la Fundación Teatro Santander
En 1928, un grupo de empresarios cívicos de Bucaramanga decidió construir un importante teatro para la ciudad. Con este propósito, contrataron al arquitecto francés George Carpentier, quien estaba radicado en La Habana y vivió en Bucaramanga desde 1928 hasta 1932. El Teatro Santander es un magnífico proyecto de estilo republicano y arquitectura moderna de la época, que se convirtió en el centro cultural de la ciudad. Sin embargo, debido al deterioro de la zona, el teatro fue abandonado hasta 2007, cuando fue donado a la Universidad de los Andes con la intención de venderlo y demolerlo. Ante esta situación, un grupo de ciudadanos se unió para salvarlo, en coordinación con la Cámara de Comercio, las Universidades UNAB y UDES, el Centro Cultural del Oriente, el Municipio de Bucaramanga y dos importantes empresarios de la ciudad, el grupo MARVAL y el grupo RAYCO. Hoy, para orgullo de la ciudad, después de varios años de desarrollo, contamos con un Teatro Santander revitalizado y en pleno funcionamiento.